Compañero humillante: Siempre, siempre a tu lado...

Quedé cautivado en el momento en que lo vi. Ojos hermosos, un cuerpo esbelto que se rompería si la abrazaras y un pecho hinchado que contradice su cuerpo. Antes de darme cuenta, me colé en la casa de mi esposa y la violé. Sin embargo, no quedé satisfecho con eso y decidí vivir en esa casa.